‘¿Me haces caso?’
‘¿Me haces caso? El derecho de los niños pequeños a participar en las decisiones que los afectan‘ subraya que la participación aumenta la autoestima de los niños y la confianza en sí mismos, fomenta sus capacidades generales, produce mejores rendimientos, refuerza la comprensión de los procesos democráticos y el compromiso en los mismos, y además, protege a los niños con mayor eficacia. Brinda la oportunidad de desarrollar el sentido de autonomía, la independencia, una mayor competencia y adaptabilidad social. Los beneficios son significativos y los adultos, bien con responsabilidad directa o indirecta sobre los niños, necesitan adquirir mayor nivel de humildad reconociendo que es mucho lo que se puede aprender de los niños. Y es más, el argumento a favor de la escucha a los niños va más allá de los efectos beneficiosos. Es también un asunto de justicia social y derechos humanos. Todas las personas, por jóvenes que sean, tienen el derecho a ser partícipes de sus propias vidas, de influir sobre lo que les ocurre, de implicarse en la generación de sus propio entorno, de tomar decisiones y de que sus opiniones sean respetadas y valoradas.
La creación de entornos donde realmente se cumplan estos derechos para los niños pequeños requerirá de un profundo cambio. En la mayoría de países del mundo, se percibe a los niños pequeños como receptores pasivos de atención y cuidado. Se subestima su capacidad para la participación, se niega la conducción de sus propias vidas y no se reconoce el valor de tomarlos en cuenta. Todavía existe una creciente y persuasiva evidencia para combatir estas barreras.
Gerison Lansdown
Fundadora de ‘Children’s Rights Alliance for England’, abogada y consultora internacional sobre el derecho de la infancia.